Resumen : |
El estiércol puede ser aplicado a un cultivar existente de alfalfa con consecuencias negativas mínimas, siempre y cuando sea aplicado a tasas razonables antes del rebrote. La observación de prácticas razonables, como tiempo de cosecha, humedad durante el ensilaje y el uso de un inoculante bacteriano con eficacia comprobada, es esencial para mantener la calidad del forraje en este y cualquier otro escenario de producción de alfalfa |