Resumen: |
La ganadería colombiana debe realizar una labor de industrialización y un plan de competitividad que le permitan, inicialmente, proteger el mercado nacional y luego potencializar el mercado de exportación. El hato ganadero nacional debe crecer a tasas superiores al 2% anual en las mismas hectáreas de pasto actuales para poder formar un excedente de oferta exportable. Es necesario dinamizar y socializar en los ganaderos la cultura exportadora, donde sean los mismos
ganaderos quienes generen grandes empresas de riesgo y beneficios compartidos, y la asociación y apostarle a negocios futuros sea su estructura básica. Continuar con la inversión y mejoras en la infraestructura de toda la cadena cárnica, lograr su certificación en los mercados de países demandantes de carne, replantear las leyes actuales y establecer una ley de la carne para el momento futuro. |