Resumen : |
En años recientes, los inviernos han sido desafiantes y han causado impacto, tanto en la preservación de la alfalfa como en su producción. Esta situación, junto con la presión ejercida sobre los establos para tener
una mentalidad abierta hacia la conservación del ambiente, ha creado un interés renovado en sembrar cultivos forrajeros como el centeno o el triticale, inmediatamente después de cosechar el maíz. Estos cultivos pueden proporcionar beneficios ambientales, a la vez que proporcionan forraje adicional para alimentar al ganado. |