Resumen : |
Hasta hace unos años la sensación del gas solo la generaba una bebida: la gaseosa. Pero, el interés del consumidor por las propiedades carbonatadas ha crecido tanto que se trasladó a bebidas como el agua, los tés y jugos, convirtiéndose en un valor agregado que toda industria quiere aprovechar. Sin embargo el consumo per cápita en el país aún es bajo (51,4 litros) si se compara con mercados como Brasil (90 litros), Chile (126,4) o Argentina (156,6). |