Resumen : |
Hay situaciones en que la limitación en la alimentación con leche es igual atener hambreadas a las becerras. Esto es especialmente crítico en climas extremadamente fríos, en donde baja mucho la temperatura y hay vientos fuertes en los meses de invierno. Todos estamos influenciados por dos factores: genética y ambiente. La genética es preestablecida, pero la forma en que alimentamos a nuestras becerras influirá en su potencial futuro. |